Nació en Algueña, Alicante (España) el 26 de septiembre de 1895. Hija de José y Teresa. Fue la segunda de nueve hijos.
Al recibir a Jesús en su primera comunión estableció una relación de amistad y fraternidad que siempre había cultivado con sencillez y alegría. Buen viático para su opción valiente y decidida de seguir a Cristo en la vida consagrada. Eligió unirse a las Carmelitas Misioneras Teresianas.
Encarnó profundamente el carisma de la congregación que emanaba del misterio de la Iglesia y se consagró a Dios para el servicio de los demás.
La dimensión evangelizadora vivida en un clima de experiencia eclesial; como hija del Beato Francesco Palau, su misión fue la entrega generosa a los miembros del Cuerpo Místico de Cristo y hacerlos partícipes de su propia comunión de vida.
Teresa vivió enteramente como misionera en el Carmelo Teresiano desde 1915 hasta su muerte el 26 de febrero de 1941.
El 17 de diciembre de 1996 se promulgó el decreto sobre las virtudes heroicas.